Habitualmente nos encontramos con menciones a los grados de consanguinidad, grados de parentesco y grados de afinidad en cuestiones relacionadas con el ámbito administrativo y judicial.
En este artículo vamos a explicarte las diferencias entre consanguinidad, parentesco y afinidad, así como los diferentes grados que existen.
El concepto de parentesco
El parentesco en realidad es una figura legal, que viene a describir el vínculo que puede existir entre las personas integrantes de una misma familia.
Este concepto se encuentra regulado en los artículos 915 a 923 de nuestro Código Civil.
Dentro del concepto de parentesco, es preciso distinguir los denominados grados de afinidad, los grados de consanguinidad y los grados de adopción.
En los temas jurídicos es muy importante poder diferenciar todos estos grados. La razón de esta importancia es que están relacionados con los vínculos familiares y, en consecuencia, dan lugar a una serie de derechos y deberes.
Esto sucede, por ejemplo, en los asuntos relacionados con las herencias, los derechos familiares, los permisos de trabajo, los asuntos de divorcio o separación, la patria potestad, etc.
El concepto de consanguinidad
La consanguinidad es un tipo de parentesco, en este caso natural, que existe entre una persona y otras que comparten los mismos antepasados. Su nombre deriva de que es un vínculo de sangre (consanguinidad), tanto con los ascendientes como con los descendientes.
Incluso se refiere también al vínculo derivado de la adopción, aunque no sea de sangre en su sentido literal. En este caso, se refiere a los vínculos que hay entre el adoptado y sus padres adoptivos y el resto de parientes consanguíneos.
Los grados de consanguinidad serán, por lo tanto, las diferentes generaciones existentes en una misma familia y, como consecuencia, la distancia existente entre un familiar directo y otro, según la generación a la que pertenecen.
Sin embargo, la consanguinidad también puede ser colateral, es decir, estar formada por personas que proceden del mismo tronco común familiar de sangre, pero no descienden unas de otras. Este es el caso de los tíos respecto de los sobrinos, los primos entre sí, los cuñados o las nueras.
La serie de grados forma la línea, que puede ser directa o colateral.
Se llama directa la constituida por la serie de grados entre personas que descienden una de otra.
Y colateral la constituida por la serie de grados entre personas que no descienden unas de otras, pero que proceden de un tronco común.
Por lo tanto, se trata del parentesco de sangre entre personas y se mide en grados según la generación a la que pertenecen.
La proximidad del parentesco se determina por el número de generaciones. Cada generación forma un grado.
El concepto de afinidad
La afinidad, por el contrario, es una relación de parentesco que vincula a las personas mediante un vínculo de tipo legal, no sanguíneo, como por ejemplo el matrimonio. En este caso concreto, los grados de afinidad se refieren siempre a los familiares del cónyuge, o lo que es lo mismo, a su familia política.
Si, para finalizar, elaboramos un esquema con todos los grados de parentesco comentados hasta ahora, quedaría del siguiente modo:
Grados de consanguinidad
- Primer grado de consanguinidad: hijos, padres
- Segundo grado de consanguinidad: hermanos, abuelos, nietos
- Tercer grado de consanguinidad: bisabuelos, biznietos, sobrinos, tíos
- Cuarto grado de consanguinidad: primos, sobrino-nietos, tíos-abuelos
Grados de afinidad
- Primer grado de afinidad: suegros, yernos/nueras
- Segundo grado de afinidad: cuñados, abuelos del cónyuge, cónyuges de los hermanos